junio 10, 2008

Hay dias en los que uno amanece con el corazón más arrugadito de lo normal. Hoy es un dia de esos. Cuando sientes esas ganas de llorar de temor pero aliviado porque la vida te da más felicidad de la que esperabas. De hecho, amaneces amado, querido, respetado, y sobre todas las cosas, feliz.
Es cierto, hay dias en los que uno quisiera saber que es lo que va a pasar mañana, pero como siempre he dicho, nosotros lo que nacimos con las capacidades de conocer el mundo y transformarlo, dejamos que siga su rumbo porque ese es el designio del señor y sus caballeros.
Dios lo sabe como se siente uno cuando se levanta uno por la mañana con el corazon lleno de dudas, pero tambien lleno de amor y de fe.